Ella.

Aquel amor, ese amor intenso, que la llenaba por dentro. Que era una amor desmedido, exagerado, parar su corta edad.  Un amor lleno de sonrisas tontas, y de miradas perdidas. Lleno de pensamientos bonitos, de ilusiones cargadas, de esperanzas. Lleno de cuentos de hadas, de ojos verdes. Lleno de labios rosados, de bocas mordidas por timidez, de temblor en las manos y de miedo en el alma. Que estaba cargado de sueños y de compañías de tardes. Acompañado de amistades que no entendían, y de caras raras por aquella locura de amor que la poseía. Lleno de libros romanticos, y de dialogos eternos. Pero al fin y al cabo un amor, que le amaba, y eso era lo mas importante para ella. Y aunque nadie la entendía, ella seguia amandole, cada día más y más. Y le amaba tanto que era incapaz de mirarle cuando hablaban, pues tenia miedo de perderse en aquella mirada intensa, miedo de no encontrarse reflejada en aquellos ojos. Su amor por él era verdadero, sincero y desmedido. Pero hay veces que el amor no entiende a razones y se vuelve en tu contra, y te devuelve todo ese amor que tu has dado, acompañado de vacío, de miedo, de lagrimas, de puñaladas... Acompañado de nada. Pues ese amor que has dado no lo recibes de la otra persona. Y te sumerges en un mundo de penas. Y nadie te puede ayudar, porque después de todo no hay mejor ayuda que la de uno mismo. Tú sabes lo que hacer, y para eso estan los amigos parar confiramarte que lo que haces está bien o mal. Por eso no puedes esperar que nadie te venga a yudar en tu peores momentos, porque esa persona no está en tu cuarto cuando estas llorando, esa persona no está en ese dialogo tan dificil, no está simplemente. Por eso la chica tuvo que sufrir mucho parar poder entenderlo. Hay veces que el sufrimiento es la mejor medicina, pues te ayuda a valorar los momentos felices. La chica, resucitó, sí, sufrió demasiado. Por él, por ellas, por el mundo, por la sociedad.  Sufrió lo que pocas personas han sufrido a su edad, por eso ahora es tan loca cuando está con sus amigas, porque si no se comporta así, se adentra de nuevo en el mundo de las miradas eternas y los pensamientos infnitos. Tiene que sonreir cada vez que alguien está mal, tiene que ayudar a quien se ha caído, y hacer lo imposible por dos personas que se quieren, lo tiene que hacer, porque no quiere que las personas que mas quieren, pasen lo que ella ha pasado.¿Y Sabéis qué? Qué esa chica, soy yo.